Un vecino de Getxo con un problema de obesidad mórbida, estuvo a punto de morir en 2009, tras someterse a una reducción estomacal con un, entonces, prestigioso médico de Valencia, especializado en este tipo de intervenciones mediante la colocación de una banda gástrica.
La operación resultó tal fracaso, que el paciente estuvo a punto de perder la vida debido a una gravísima infección por la que estuvo varios días en cuidados intensivos.
Cinco años después, la demanda interpuesta desde el despacho de abogados Gómez Menchaca, ha conseguido que el juez dicte sentencia favorable al paciente. El magistrado no alude a si hubo o no mala praxis médica,se limitó a constatar que se produjo una infección casi mortal cuando el paciente estuvo en el quirófano; por ello, ha dictado una sentencia que condena a una indemnización de 40.000 euros al afectado.
Sin duda, otro caso de éxito más para nuestro despacho.