El paciente quedó incapacitado para ‘trabajar de forma permanente‘
Osakidetza ha sido condenada a indemnizar con 54.000 euros por el juzgado Contencioso-administrativo número 2 de Bilbao debido a un error médico que obligó a intervenir cuatro veces durante 3 años a un paciente que quedó incapacitado por el INSS para trabajar de forma permanente. El hombre, transportista de profesión, de 52 años y vecino de Portugalete presentaba un cuadro de colecistitis aguda cuando ingresó en el hospital de San Eloy en febrero de 2017. En es momento, fue intervenido con control ecográfico, sin embargo la evolución no fue la esperada tras el alta por lo que en marzo se le realizó una colecistectomía laparoscópica con sangrado en sábana, durante la cual se lesionó la vía a causa de un error médico.
Otras dos intervenciones más
En noviembre del mismo año, el paciente requirió ingreso de nuevo al presentar fuertes dolores y una hernia, y en febrero de 2018 se le realizó una nueva intervención, sin embargo debido a la aparición de una nueva hernia paraumbilical, fue operado de nuevo en septiembre de ese mismo año. El resultado volvió a no ser el deseado y en 2020 regresó a quirófano para ‘corregirle la eventración supraumbilical‘.
El paciente fue reconocido en 2019 por el INSS con una incapacidad permanente total para el desarrollo de su profesión por dolores abdominales limitantes, náuseas y bultoma abdominal con el esfuerzo físico y sin posibilidad de recuperación.
Mala praxis por parte del cirujano
En la sentencia, la magistrada confirma que existió mala praxis por parte del cirujano, que clipó por error el conducto hepático en lugar de otro, lo que ha ocasionado las posteriores intervenciones a las que el hombre ha debido someterse y las posteriores secuelas que le han incapacitado para su desarrollo profesional. El paciente, representado por el despacho de Gómez Menchada, será indemnizado con 54.000 euros.
Fuente: El Correo