Castilla y León está siendo el único territorio en el que no se está asumiendo, por parte del sistema público de salud, el daño causado en las operaciones de retina en las que se empleó perfluoroctano y no se han empezado a tramitar las indemnizaciones, como en otras Comunidades Autónomas está sucediendo.
Así, ante el rechazo de la vía administrativa, SACYL, Servicio de Salud de Castilla y León, tendrá que hacer frente a las 5 demandas admitidas a trámite por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Autónoma. Dicho tribunal exige al demandado, la notificación de más demandas con la vinculación al uso del fármaco.
Nuestro bufete, como representante de los demandantes, lamenta las trabas que SACYL ha ido presentando para la resolución de las reclamaciones y que sea el único Sistema de Salud que no ha empezado a tramitar las indemnizaciones tras el informe publicado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) que confirma la causa-efecto de este producto en las operaciones antes citadas.
Una de nuestras representadas es Amaya Gil Sendino quién se siente “indignada” con la postura de “dejadez” que ha adoptado SACYL y no entiende cómo todavía no se han puesto en contacto con los afectados. Amaya, que el próximo diciembre tendrá una nueva revisión médica, no espera respuesta de los facultativos tampoco en esta ocasión.
Ahora que sus demandas han sido admitidas a trámite, se solicitarán compensaciones que en cada caso serán diferentes ya que habrá que estudiar la repercusión en las vidas de cada demandante, sus edades y situación laboral etc..
Si antes no se llega a un acuerdo extrajudicial, se prevé un proceso de 8 a 10 meses. Tal vez demasiado tiempo para los afectados que quieren cerrar este episodio y seguir con sus vidas.